La idea de este texto surge de una conversación con algunos compañeros asiduos en las apuestas por Internet, curiosamente todos resaltábamos la importancia de controlar la mente en nuestras apuestas, pero éste es un tema que no se aborda en profundidad y que a mi juicio separa el éxito del fracaso en muchas ocasiones.
En primer lugar, tenemos todos claro que emplear un sistema es fundamental y que a día de hoy, no hay sistema 100% fiable. Pero el binomio, sistema adecuado y emplear la mente de manera correcta va a hacer que el sistema sea más fiable que por sí solo.
En este momento algunos pensareis ¿este tío que dice? Un par de ejemplos solamente:
- No se apuesta igual, ni se sigue el sistema de la misma manera, cuando se apuesta 1€ que cuando se apuestan 100€, ¿por qué? La base debería ser la misma, pero si se ha experimentado, no es ni mucho menos igual.
- Cuando fallamos en una apuesta y entramos en pérdidas inevitablemente, ¿por qué solemos arriesgar en la apuesta siguiente para recuperar las pérdidas anteriores? Normalmente, esta ansiedad por recuperar rápidamente lo perdido nos lleva, a la larga, a doblar nuestras pérdidas.
¿Quién nunca ha arriesgado por encima de sus posibilidades? ¿Quién nunca se ha cegado porque podía haber ganado una buena suma y ha perdido por querer más? Sin duda, nuestra mente y nuestra psicología tiene la respuesta y si somos capaces de controlarla en gran medida mayor éxito alcanzaremos en nuestras apuestas.
Dicho de otro modo: “La fortaleza psicológica marca la diferencia entre el jugador que disfruta de su pasión por las apuestas y el jugador que a menudo es víctima de sus pasiones” (en: http://www.iapuestas.com/ ; http://www.microcaos.net/).
Por desgracia, en la red hay mucha información sobre diversos sistemas a utilizar para apostar, pero los textos en relación a cómo controlar nuestra mente son escasos y poco profundos. No pretendo aportar un manual, ni ningún canon en este sentido, sino haceros ver la importancia de este aspecto y esbozar unas ideas concretas para tener en cuenta y poder trabajar sobre ello.
Algunos autores califican los posibles errores psicológicos del propio apostante, en lo que llamaré las 3 “i”, que a continuación abordaremos:
Ø IMPRUDENCIA.
Ø IMPACIENCIA.
Ø INDISCIPLINA.
Anja Ander siguiendo este mismo tema hace una clasificación de los errores en función del apostante, del bookie y de las cuotas de mercado. Respecto a esto sólo nos interesaría en este momento los errores propios del apostante, ya que lo relativo a menospreciar una cuota o sobrevalorar otra debería estar resuelto empleando el sistema con las pautas adecuadas en la elección tanto del evento, como de la cuota de nuestra apuesta...
Voy a abordar de lleno las 3 “i”:
- IMPRUDENCIA: Aquí entraríamos en la dualidad éxito / fracaso. En un momento eufórico de ganancia, pensamos que es nuestra racha buena y aumentamos los riesgos por encima de nuestras posibilidades. Por otro lado el fracaso es sin duda la puerta de la impaciencia.
- IMPACIENCIA: Un buen indicador de no estar psicológicamente preparado para afrontar ciertos éxitos o fracasos en las apuestas. “Cuando no se está preparado para perder 1.000€, no estamos preparados para ganar 1.000€”. Es así de sencillo y complicado a la vez. El querer ganar demasiado rápido y subir nuestro bankroll, el asumir siempre un riesgo elevado o cercano al máximo, el querer recuperar y si puede ser obtener beneficios después de una anterior pérdida, son todos signos de impaciencia y de no estar preparado para la empresa que llevamos entre manos.
- INDISCIPLINA: Es un ejemplo claro del no seguimiento del sistema. Haciendo un símil con el béisbol el saltarnos bases va a hacer que el día que nos pillen nos eliminen, por eso es mejor cubrir primera base y de ahí, en el momento preciso, acudir a la segunda y sucesivas.
En como combatir estos errores del apostador, Anja Ander hace referencia a algunos términos psicológicos importantes, yo destacaría el siguiente:
Ø AUTOCONTROL.
Quizás sea la base del empleo de nuestra mente en la aplicación de nuestro sistema de apuestas. Recordad que “quién no sabe a donde va cualquier camino le conduce allí”. Por eso debemos de marcarnos un objetivo concreto adecuado, tanto a nuestro bankroll, a nuestras posibilidades, a las peculiaridades del partido (equipos, clasificación, liga a la que pertenecen...) y una vez conseguido saber retirarnos con nuestras ganancias sin dilación.
Alba Redondo en su artículo “La psicología juega malas pasadas a los inversores” añade un concepto estrechamente ligado con el autocontrol:
Ø DISCIPLINA.
Yo añadiría un par de términos más, como son:
Ø SERENIDAD.
Ø SENTIDO COMÚN.
Controlando estos 4 conceptos podremos, sin duda, sacar el máximo rendimiento a nuestro sistema y por ende a nuestras apuestas. Para ello conviene establecer unas pautas de actuación, que hay que cumplir. Si nos saltamos estas pautas estamos perdiendo la batalla contra nuestra mente y alguna de las 3 “i” está guiando nuestra apuesta, lo que a la larga sólo nos llevará al fracaso y a la desesperación.
En primer lugar, tenemos todos claro que emplear un sistema es fundamental y que a día de hoy, no hay sistema 100% fiable. Pero el binomio, sistema adecuado y emplear la mente de manera correcta va a hacer que el sistema sea más fiable que por sí solo.
En este momento algunos pensareis ¿este tío que dice? Un par de ejemplos solamente:
- No se apuesta igual, ni se sigue el sistema de la misma manera, cuando se apuesta 1€ que cuando se apuestan 100€, ¿por qué? La base debería ser la misma, pero si se ha experimentado, no es ni mucho menos igual.
- Cuando fallamos en una apuesta y entramos en pérdidas inevitablemente, ¿por qué solemos arriesgar en la apuesta siguiente para recuperar las pérdidas anteriores? Normalmente, esta ansiedad por recuperar rápidamente lo perdido nos lleva, a la larga, a doblar nuestras pérdidas.
¿Quién nunca ha arriesgado por encima de sus posibilidades? ¿Quién nunca se ha cegado porque podía haber ganado una buena suma y ha perdido por querer más? Sin duda, nuestra mente y nuestra psicología tiene la respuesta y si somos capaces de controlarla en gran medida mayor éxito alcanzaremos en nuestras apuestas.
Dicho de otro modo: “La fortaleza psicológica marca la diferencia entre el jugador que disfruta de su pasión por las apuestas y el jugador que a menudo es víctima de sus pasiones” (en: http://www.iapuestas.com/ ; http://www.microcaos.net/).
Por desgracia, en la red hay mucha información sobre diversos sistemas a utilizar para apostar, pero los textos en relación a cómo controlar nuestra mente son escasos y poco profundos. No pretendo aportar un manual, ni ningún canon en este sentido, sino haceros ver la importancia de este aspecto y esbozar unas ideas concretas para tener en cuenta y poder trabajar sobre ello.
Algunos autores califican los posibles errores psicológicos del propio apostante, en lo que llamaré las 3 “i”, que a continuación abordaremos:
Ø IMPRUDENCIA.
Ø IMPACIENCIA.
Ø INDISCIPLINA.
Anja Ander siguiendo este mismo tema hace una clasificación de los errores en función del apostante, del bookie y de las cuotas de mercado. Respecto a esto sólo nos interesaría en este momento los errores propios del apostante, ya que lo relativo a menospreciar una cuota o sobrevalorar otra debería estar resuelto empleando el sistema con las pautas adecuadas en la elección tanto del evento, como de la cuota de nuestra apuesta...
Voy a abordar de lleno las 3 “i”:
- IMPRUDENCIA: Aquí entraríamos en la dualidad éxito / fracaso. En un momento eufórico de ganancia, pensamos que es nuestra racha buena y aumentamos los riesgos por encima de nuestras posibilidades. Por otro lado el fracaso es sin duda la puerta de la impaciencia.
- IMPACIENCIA: Un buen indicador de no estar psicológicamente preparado para afrontar ciertos éxitos o fracasos en las apuestas. “Cuando no se está preparado para perder 1.000€, no estamos preparados para ganar 1.000€”. Es así de sencillo y complicado a la vez. El querer ganar demasiado rápido y subir nuestro bankroll, el asumir siempre un riesgo elevado o cercano al máximo, el querer recuperar y si puede ser obtener beneficios después de una anterior pérdida, son todos signos de impaciencia y de no estar preparado para la empresa que llevamos entre manos.
- INDISCIPLINA: Es un ejemplo claro del no seguimiento del sistema. Haciendo un símil con el béisbol el saltarnos bases va a hacer que el día que nos pillen nos eliminen, por eso es mejor cubrir primera base y de ahí, en el momento preciso, acudir a la segunda y sucesivas.
En como combatir estos errores del apostador, Anja Ander hace referencia a algunos términos psicológicos importantes, yo destacaría el siguiente:
Ø AUTOCONTROL.
Quizás sea la base del empleo de nuestra mente en la aplicación de nuestro sistema de apuestas. Recordad que “quién no sabe a donde va cualquier camino le conduce allí”. Por eso debemos de marcarnos un objetivo concreto adecuado, tanto a nuestro bankroll, a nuestras posibilidades, a las peculiaridades del partido (equipos, clasificación, liga a la que pertenecen...) y una vez conseguido saber retirarnos con nuestras ganancias sin dilación.
Alba Redondo en su artículo “La psicología juega malas pasadas a los inversores” añade un concepto estrechamente ligado con el autocontrol:
Ø DISCIPLINA.
Yo añadiría un par de términos más, como son:
Ø SERENIDAD.
Ø SENTIDO COMÚN.
Controlando estos 4 conceptos podremos, sin duda, sacar el máximo rendimiento a nuestro sistema y por ende a nuestras apuestas. Para ello conviene establecer unas pautas de actuación, que hay que cumplir. Si nos saltamos estas pautas estamos perdiendo la batalla contra nuestra mente y alguna de las 3 “i” está guiando nuestra apuesta, lo que a la larga sólo nos llevará al fracaso y a la desesperación.
Yo establecería las siguientes acciones a tener en cuenta y a reflexionar profundamente sobre ellas, esta claro que seguro que cada apostante podría aportar algunas más, pero lo importante es que sepamos controlar en todo momento la situación y eso no es ni mucho menos fácil.
1º) Elijamos el sistema que elijamos, si vemos que a corto o largo plazo nos es eficaz, debemos de sacrificar las rachas antes que el sistema. Me explico, en ocasiones van a venir malas rachas y volvernos locos cambiando la “columna vertebral” de nuestro sistema o el sistema entero sólo va a hacer que nos ofusquemos y que la situación probablemente no mejore, sino todo lo contrario.
“Si algo ha funcionado antes, no hay motivos para pensar que ahora no va a funcionar”. Seamos siempre fieles a nosotros mismos y a nuestro estilo elegido.
2º) Debemos de asumir el riesgo en nuestras apuestas que nos permita ser capaz de jugar como siempre. Yo lo resumo en “no pierdas más de lo que mañana puedas recuperar”.
Refrendando esta idea el Dr. Lasker nos habla de apostar en el nivel que uno se sienta cómodo, ya que nunca hay que apostar cantidades que uno no pueda perder, porque si es así chocaremos con la barrera psicológica y nos crearemos una presión innecesaria que nos llevará al fracaso.
En este aspecto nos podría ayudar mucho una buena gestión de nuestro bankroll y el marcarnos un objetivo inicial.
3º) Ceñirnos a nuestros objetivos en la apuesta, no queriendo ser codiciosos. Si nuestro objetivo es ganar 10€ y ya los hemos conseguido, no debemos forzar más, el trabajo está bien hecho y la avaricia sólo lleva a estropear en 1 minuto lo que hemos podido hacer bien durante semanas. Cuando no es posible ganar, también hay que saber retirarse en tablas o con las pérdidas mínimas y esperar nuestro momento en otro evento posterior. Esto es un claro signo de autocontrol.
4º) En las malas rachas, que son inevitables, es cuanto más fieles debemos ser a los conceptos anteriores y el sentido común es el que debe prevalecer en nuestras acciones al apostar y al efectuar nuestros trading.
Debemos tener claro que todo tiene su proceso y si no se está preparado para perder 100€, no se está preparado tampoco para ganarlos.
5º) Tanto en las malas rachas, como en determinados momentos es bueno mantener la cabeza fría y no volverse loco. Es muy común cuando concatenamos varias pérdidas seguidas, olvidarnos de todo y querer recuperar a toda cosa, haciendo locuras que sólo nos llevan a liquidar todo nuestro bankroll. En el lado opuesto, cuando estamos en la cresta de la ola, nos nublamos y las apuestas nos manejan, la impaciencia por ganar más y cuanto más rápido mejor, nos llevan como el caso anterior a quedarnos a 0 en nuestra cuenta.
En ocasiones, puede ser recomendable cuando estamos sumidos en la decepción o en el éxito tomarnos el día libre, ir a pasear, al cine, etc. y dejar las apuestas para otro momento, cuando estemos psicológicamente restablecidos. La verdad es que esta es una medida, a mi juicio, más que necesaria cada cierto tiempo, porque nos limpia la mente y nos permite cargar de nuevo las pilas para nuevos momentos de beneficios en nuestras apuestas.
6º) Para no extenderme mucho más, como última pauta, hay que respetar el principio de progresión de las cosas, ya que no se puede ganar siempre y por tanto, no siempre se puede arriesgar al máximo. Los riesgos deben estar siempre controlados, como ya he mencionado anteriormente, pero además deben ser progresivos y modulables, ya que la realidad nos ha demostrado que no siempre vamos a ganar.
BIBLIOGRAFÍA: (páginas consultadas en 2007)
ANDER, Anja. “El error psicológico”. 24/04/2007; en http://www.soloapuestas.com/index.php?modulo=noticias&op=mostrar_noticia&idnoticia=216&idcategoria=9
Dr. LASKER. “¿Quién es el Dr. Lasker?”. 01/01/2007; en http://www.soloapuestas.com/index.php?modulo=noticias&op=mostrar_noticia&idcategoria=2&idnoticia=20
REDONDO, Alba. “La psicología juega malas pasadas a los inversores”. 12/08/2007; en http://www.expansion.com/edicion/exp/mercados/es/desarrollo/1025481.html
http://www.iapuestas.com/Guia/psicologiaapuestasdeportivas.asp
http://www.microcaos.net/juegos/apuestas/apuestas-por-internet-psicologia-del-jugador
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